Cómo Hacer tu Estudio de Grabación Casero. Guía para tu Home Studio

Tu estudio de grabación casero. Cada vez es más habitual escuchar en el mundo de la locución y el voiceover el concepto de «home studio«, que consiste simplemente en montarse un estudio de grabación en tu propio domicilio.

Suponiendo que ya conocemos todos los consejos para ser un buen locutor, ahora ya estamos listos para lanzarnos a buscar nuevos proyectos y construir nuestro propio estudio de grabación. Lo más recomendable es poder acceder a él con la mayor facilidad posible y… ¡qué mejor que en nuestra propia casa!

Aunque parezca increíble, muchas de las grabaciones que escuchamos hoy en día en la televisión o en la radio, se hacen en un estudio casero, un estudio que el propio locutor ha acondicionado para poder trabajar desde allí. Así que ya sabes, no hace falta acudir a un estudio profesional y pagar un alquiler para poder dedicarte al mundo del voiceover.

¿No crees ahora que montarte tu propio estudio es una gran idea?  Y es mucho más sencillo de lo que puedes imaginar. Vamos a repasar y enumerar los pasos más importantes que necesitas para montar tu estudio de grabación casero y sacarle el mayor rendimiento. Al principio puede sonar desafiante el hecho de construir nuestro espacio para grabar nuestras locuciones profesionales, pero no tenemos por qué asustarnos.

Un estudio de grabación casero no necesita de todas las instalaciones con las que cuenta un estudio profesional, recuerda que sólo vas a grabar voz, no necesitas grandes espacios. Además, con todas las nuevas tecnologías que tenemos a nuestro servicio, lograr una calidad máxima en el sonido del audio está a nuestro alcance fácilmente.

1. Un ordenador

El primer componente que necesitamos es un ordenador. No podemos plantearnos tener un home studio hoy si no es con tecnología digital. Y para eso, sea un PC o un Mac, necesitaremos un dispositivo lo suficientemente potente para gestionar sonido. En ese sentido, hay que tener en cuenta los dos puntos clave a la hora de elegir un buen ordenador:

• que tenga un procesador potente.
• que cuente con una memoria RAM extensa.

Estos dos elementos son como el cerebro de nuestro estudio, así que mejor asegurarse de que funcionan sin problemas.

Cumpliendo estos dos requisitos, el resto es todo cuestión de gustos y necesidades, aunque es importante valorar si queremos un ordenador de sobremesa o portátil, que cuenta con menos prestaciones, pero tiene la ventaja de poder trabajar donde quieras.

2. Software de edición o DAW.

El DAW (Digital Audio Workstation) es el software que necesitarás en tu ordenador para grabar, editar, masterizar, mezclar, o hacer todo tipo de arreglos en tus grabaciones. Algunos de los más recomendados son: Pro Tools, Cubase, Sonar, Audition o Studio One, pero existen infinidad de alternativas, de todos los niveles y precios. Solo tienes que elegir el que te resulte más práctico y fácil de utilizar a ti.

Una opción muy recomendable es Audacity, una herramienta muy fácil de utilizar por intuitiva y además gratis. Te permite grabar, editar, mezclar, digitalizar otras grabaciones, grabar sonidos que se estén reproduciendo en tu ordenador e importar y exportar proyectos en diversos formatos de archivo.

Si consideras que Audacity puede ser un software de edición de audio que se ajusta a tus necesidades, te recomendamos que eches un vistazo a nuestros VIDEO TUTORIALES para sacarme el mejor rendimiento. Puedes hacerlo aquí.

3. La interfaz de audio.

También llamada tarjeta de sonido es la pieza de hardware encargada de conectar tu ordenador con el resto del equipo de producción. Necesario para gestionar las entradas y salidas del ordenador, así como para procesar el sonido, y convertir la señal analógica en digital, y viceversa.

Como con todos los elementos, también tienes opciones de diferentes gamas, más baratas y también más caras. La buena noticia es que no es necesario hacer un desembolso excesivo porque te bastará con una interfaz de 2 canales. Eso sí, si tú eres más de ir a lo grande (y más caro) adelante, que nadie te detenga.

Algunas de nuestras recomendaciones en relación calidad/precio son las siguientes:

• Focusrite Scarlett 2i2.
• Presonus AudioBox.
• Steinberg UR824.
• M-Audio M-Track 2x2M.

4. Los auriculares de estudio.

Hay dos tipos de auriculares de estudio fundamentales:

• Auriculares cerrados para pre-escucha: los cuales ofrecen un aislamiento del exterior, pero con una calidad de sonido menos real. Son imprescindibles cuando grabamos con micrófonos. ¿Qué opciones son interesantes? Sennheiser HD280 o Sony MDR 7506.

• Auriculares abiertos (o semi-abiertos) para mezclar: ofrecen una mejor calidad de sonido, pero menos aislamiento. Son ideales para la fase de mezcla, ya que producen un sonido más natural y de mayor calidad. ¿Cuáles podrían interesarte? Nosotros te proponemos los siguientes: Beyerdynamic DT990 Pro o AKG K-701.

5. Monitores de estudio.

Otra herramienta indispensable son los monitores. Es importante recordar que necesitamos unos monitores «planos», que reproduzcan el más amplio rango de frecuencias posible, y que nos den un sonido neutro, es decir, que no «adornen» el sonido.

Lo que vamos a hacer con estos monitores será supervisar nuestro trabajo. Cuando estemos grabando usaremos auriculares y apagaremos los monitores, y cuando estemos trabajando sobre el audio usaremos principalmente los monitores.

Algunos ejemplos de monitores son: Mackie MR524, M-Audio BX8 D2 o YAMAHA HS8

6. El micrófono.

Artículo relacionado: Los mejores micrófonos de condensador para grabar en tu estudio.

El último, pero desde luego no menos importante, de los elementos básicos para montar tu estudio de grabación en casa es un micrófono de calidad, que te permita grabar la voz directamente desde una línea de entrada. Lo mejor es que optes por un micrófono de condensador, ya que son los mejores para grabar tu voz sin distorsión.

Algunos de los micrófonos más clásicos y con mayor diafragma son: Rode NT1A o AUDIO-TECHNICA-AT2020 y AT4040. Este último presenta un diafragma avanzado y tensado específicamente para proporcionar características de sonidos suaves y naturales.

No obstante, el rey de los micrófonos de estudio para locución y canto, desde hace varios años, es el Neumann U87. Combina una alta sensibilidad, que da un sonido muy detallado, con una respuesta frecuencial que colorea agradablemente la mayoría de las voces. ¿El problema? Cuesta varios miles de euros.

Como no todos los locutores tienen dinero para gastar, os ofrecemos algunas alternativas más económicas. Charlando con nuestro locutor, Johanny, hemos conocido los que en su opinión son las mejores opciones en el mercado actual:

• Shure. Una de las marcas más comunes, y recomienda dos modelos: KSM27 y KSM44. El primero al que se refiere es un micrófono para cualquier tipo de grabación. El segundo, de gama alta es ideal como primera opción en un estudio de grabación de gran nivel.
• AKG. Su modelo estrella es el AKG C414, aunque el C214 también es un producto interesante. Ambos son micrófonos de calidad.
• Electro-voice. Un micrófono dinámico. Uno de sus favoritos es el RE20, para cabinas de radio y cabinas caseras de voiceover.

7. Los accesorios.

 La comodidad a la hora de trabajar, de grabar, es fundamental, por eso sería conveniente contar con algunos complementos imprescindibles en tu estudio de grabación. ¿Cuáles? Vamos a repasarlos:

• Pie de micro para fijar el micrófono a la altura de tu boca y obtener una mejor calidad de sonido.
• Los filtros anti-pop. ¿Para qué sirven? Mejorar la calidad de las grabaciones. Es una malla que acondiciona el micrófono, para que los “golpes” de las «S» y las «P» no se marquen demasiado en tus grabaciones y afecten a la calidad de audio.
• Un stand para hojas o atril para dejar las hojas de tu guion y poder manejarlas cómodamente mientras trabajas tu audio. ¿La altura? La que tú consideres, varía según tu conveniencia de cada uno.

8. El acondicionamiento y tratamiento acústico – Cabinas.

La acústica de la habitación suele ser el inconveniente más habitual a la hora de montar un home studio. Normalmente las habitaciones de una casa no tienen una buena acústica y necesitaremos algunos elementos que nos puedan ayudar a conseguirlo.

Si estás comenzando es normal que busques la opción más económica. Puedes empezar creando tu estudio en un espacio cerrado, una habitación pequeña, un rincón previamente insonorizado para aislarlo del ruido. Solo necesitarás comprar una espuma especial que absorba el sonido, evitando rebotes, y rodear el espacio que ocupáis tú y el micro formando una pequeña cápsula.

Si deseas ir un paso más allá e invertir más en tu negocio tu mejor opción es una cabina insonorizada, Acoustic Booth o simplemente Booth (en inglés)

Nuestra recomendación es que antes de invertir en una cabina para grabar tus locuciones profesionales te lo tomes con calma e investigues, consultes y te documentes para elegir la opción que mejor se adapte a ti. ¿Cabina fija o cabina portátil?

Existen opciones básicas de cabinas modulares portátiles que se pueden personalizar según tus gustos y necesidades: puertas de vidrio, diferentes dimensiones y colores, con diseños de paneles acústicos y soportes configurables entre sí para dar forma a tu cabina ideal.

Dos buenas opciones en el mercado que ofrecen un producto de calidad son: Studio Bricks, Huddlestone y Demvox

Con esta completa Guía ya estáis preparados para montar vuestro propio estudio de grabación casero y profesional. Seguro que en menos tiempo del que imaginas estarás grabando tus primeras locuciones profesionales.

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